lunes, 21 de febrero de 2011

La ética y la publicidad

¿Realmente creen los anuncios? ¿Son mejores productos los anunciados por personas célebres?
¿Siguen teniendo credibilidad las personas que ya le traicionaron al menos una vez?

En realidad no son preguntas, es solo retórica

Vivimos en una sociedad de consumo disparatado.
¿Han pensado cuantos artículos existen repetidos en un sin fin de marcas?

Pongamos un ejemplo concreto; Una crema hidratante.
Seguramente ha oído hablar de un buen número de ellas. La mayoría se jactan de ser especiales, o directamente las mejores, incluso algunas no nos dañan y me atrevería a decir que algunas puede ser útiles.

¿Ha visto alguna mujer vulgar y poco agraciada haciendo promoción de alguna marca?
Normalmente las personas que anuncian esta serie de cosméticos tienen un alto atractivo, que usted, pobre crédul@, no alcanzará nunca.
Las tersas pieles o los sedosos cabellos de quienes promocionan las marcas, viven de un don de la naturaleza, naciendo con unas cualidades determinadas para los cánones de belleza actuales.

No necesitan un doctorado, ni una especialización para ganar mucho más dinero que cualquier trabajador medio. solo ha de poner su rostro, o tan solo alguna parte de su cuerpo diciendo que es producto de la marca que quieren vender, en lugar de la naturaleza o intentándole convencer, de un modo ridículo, que usando tal o cual producto, va a ser muchísimo mas atractiv@ para las personas del sexo opuesto...o no.

Es común las pequeñas críticas sobre este aspecto pero las leyes tienen cierta manga ancha y no actúan para salvaguardar al consumidor, sino en conflictos de interés entre marcas-patentes

Así, mientras hace una cena precocinada que le asegurará el éxito junto al embriagador perfume que le arrastrará a los placeres más lujuriosos, gracias a los lubricantes a tal efecto, va usted y se lo cree.

Vea usted los anuncios que por unos instantes ponen unas letras muy pequeñas para leerse en tan breve tiempo y lea la contradicción que supone para el anuncio en si.

Espero que ese pequeño frasco que compró para aparentar mucho mas joven de lo que en realidad es (¿para mentir a quien?) le ofrezca la posibilidad de perder parte de su credulidad y use su dinero mas sabiamente.

¿Le gusta ver anuncios?

¿Ha probado a comer correctamente y a beber agua sana?

miércoles, 16 de febrero de 2011

Hechos son amores y no buenas razones

Todo el mundo sabe que del dicho al hecho, hay un buen trecho
(Hago un paréntesis para enorgullecerme del saber popular de los dichos, pues es una muestra que el pueblo no es tonto, al menos, no todo el)
Hemos pasado de las promesas de los fabricantes que incumplen mintiendo descaradamente, a ser utilizada por la política - Total, nadie se extraña-
Atrás queda aquel, puedo prometer y prometo, del cual se burlaban muchos de quien ha sido uno de los mejores políticos que hemos podido tener, aunque no tuviera mucho margen de movimiento, hizo mucho mas de lo que ningún otro presidente ha hecho, aunque no estuviera del todo de acuerdo con su política, me quitaría el sombrero de tenerlo.

Lo que en realidad queda es una economía rota por los mismos que ahora no quieren subsanarla
Una libertad cada vez mas barata de despido
Mil excusas para hacerse con un ERE
Más familias rotas
y un mundo, nuestra casa, agonizante, sin que esto importe nada a quienes lo maltratan.

Si todos esperamos que alguien de el primer paso, no lo hará nadie o se encontrará solo un paso al frente
¿Verdad señores de los sindicatos?

Cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar

Cuando sean nuestros últimos momentos, mirémonos las manos a ver cuan llenas o vacías las dejamos.

¿Y tu que haces?

¿ande yo caliente, ríase la gente?

domingo, 13 de febrero de 2011

Represión y libertad

Represión. Solo su mención da una sensación de negatividad
Libertad suena mas próxima a antirepresión, a poder hacer lo que se quiera.

Desde el momento que argumentamos un derecho, tenemos un deber y es donde la línea entre libertad y libertinaje se pierde.

Cuando se habla de la libertad de expresión, existen ciertas acotaciones, como las que impulsen al auto sufrimiento o la incitación a hacerlo a terceros.

Todo tiene un límite, la mayoría de ellos expuestos en las leyes penales, donde el poder, el gobierno, ejerce la represión por la fuerza política o física ante la vulneración de dichos límites.
¿Pero que pasa cuando el poder no protege las libertades vulneradas por quienes rebasan el límite?

Este es el punto donde creo que nos encontramos. Venimos de un sistema político represivo y a nadie le gusta ser tildado de menoscabar las libertades.
Al parecer, políticamente es una patata caliente que nadie quiere.
Estamos en un estado de derecho, con igualdad de condiciones, pero ¿Entendemos este concepto todos?
Tener la misma libertad que otro no justifica la acción ilegal o abusiva que termine menoscabando los derechos de los demás.

Tengo la sensación que mis derechos no están siendo defendidos dada la equívoca sensación de que todos somos iguales. Posiblemente ante la justicia si, pero en conciencia y propósito, de ninguna manera.

¿Porque al vivir en un país democrático, la represión positiva, la represión que condena las transgresiones se vuelve tan inconsistente?

Se da por hecho que el ciudadano en general es buen observador de las normas, pero hay un hecho irrefutable y es que no tenemos conciencia cívica y el egoísmo impera, pisoteando las libertades ajenas mientras la justicia, mas ciega ahora que nunca, permite un estado de degeneración del sentido de bienestar social.

Personalmente no podría explicar ni una sola muerte producida en una guerra, pero tampoco comprendo la falta de respeto de los que lo hicieron, morir, en aras de la libertad que actualmente poseemos.
¿Es la decadencia de nuestra sociedad?
¿Volverán héroes y villanos a enfrentarse cuando la pasividad de al traste con la libertad?
Bienvenida sea la represión para los antisociales.