sábado, 20 de diciembre de 2014

La empresa o locura más grande.



Como quienes se declaran alcohólicos orgullosos en su lucha contra sus demonios, yo grito ¡Soy un indignado! solo que es un mal de difícil cura porque el remedio no está en mis manos, sino en la de todos y no me refiero a que todos tengamos el remedio sino que se necesitan a todos para ponerlo.

Mi socorrido cantautor J.M Serrat nos recuerda en una de sus canciones, que las compañías nos modelan y por eso es importante escoger  "lo mejor de cada casa"

Quizás por eso tengo pocos amigos, un puñado de ellos de los que sentirse partícipe de una raza o especie.


Un médico al que considero amigo a pesar de la distancia que su código deontológico obliga, me dijo en cierta ocasión cuando hablamos sobre esa indignación, que no está en mis manos cambiar el mundo entero, y que debería canalizar mi esfuerzo en algo que exista la posibilidad de alcanzar.

Bien, no voy a ser el salvador del mundo. Tampoco pasaba por mi cabeza ser un superheroe ni busco reconocimiento universal.


Ayer nos reunimos unos amigos. El placer hizo, que esa amargura común, compartida fuese mas llevadera. Si encontrásemos los suficientes de esa calidad humana, existiría una posibilidad de cambia el mundo, sin partir de la violencia como histórica, repetitiva y estúpidamente se ha hecho.

Encontré en sus corazones el mismo dolor que en el mío y diferentes soluciones para sobrellevarlo, todas válidas, personales e intransferibles.

Durante la conversación, salió la frase "La historia la escriben los vencedores"
y nuevamente recuerdo cómo quise mejorar el mundo, con una realidad casi palpable tanto como el muro de la imposibilidad que lo impide.

Una educación única, universal supervisada por eruditos en sus materias (insobornables), la mejor educación posible al alcance de todos, sin restricciones.


No cambiaría nada mas. No sueño con descubrir soluciones energéticas, médicas ni el modo de alimentar todas las bocas. Ahí se acaba mi sueño, en el que no intervengo más que en el deseo de que un día, alguien realmente pueda encontrar el modo de lograrlo.

Después de eso, todo lo demás llegará, no solo, sino de la mano de todos.

Cuando la Humanidad se de cuenta que toda unida, solo es una parte de este planeta azul, donde todo está y debe estar conectado.

Restar, divide. Sumar multiplica.

lunes, 10 de noviembre de 2014

Donde y cuando menos te lo esperas.



Normalmente escribo sobre aquello que señalan las muchas cosas negativas que hacen los semejantes, que no iguales.

La situación política española pasa por un momento singular en el que cualquier hecho histórico,  por no decir el único, en que los habitantes de este país podían sentirse orgullosos, no por el suceso en si sino por ser el momento en que, todos a una nos importó más el frente común que mirarse el propio ombligo. 

Aunque este hecho tuviera  que ver con la lacra de la violencia de una guerra. Ha sido la vez en la que todos miraron hacia un mismo sitio.

No voy a aceptar sacar algo positivo, aunque Napoleón reconociese en ese acto, honor pero si me ha hecho pensar que la crítica continua en este blog, olvida el motivo principal que es el encuentro de lo que se supone que debe ser un ser humano,  la inteligencia, el sentido común. 

Como decia, abrumado por la denigrante actuación del gobierno y la estructura política, con la pasividad de los solo "teóricamente representados",  perdí de vista el camino, el propósito que me impulsó a escribir.

Ayer desayunaba con dos personas, de esos extraños seres que su primera intención no es egoista, ni amenazante. El tiempo se relativizó y paso inadvertido como el nexo que lo produjo.

Llegué tarde a casa, olvidando avisar de mi retraso. Mientras mi mujer me regañaba, me di cuenta de que a veces cerramos los ojos para acostumbrarnos a la oscuridad que nos rodea y nos olvidamos que la oscuridad no desaparece al cerrar los ojos, sino al abrirlos.

Esas cosas que suceden y le dan un sentido a la vida más o menos fugaz e inadvertida, que te dan el aliento para seguir encontrando otro de esos momentos, entre la oscura realidad que producen nuestros cerrados párpados.

Parece mentira, pero podriamos quedarnos deslumbrados.

Gracias. He vuelto.

miércoles, 11 de junio de 2014

Las marcas que deja vivir



Es un hermoso árbol. Al borde de un camino de tierra, junto al linde de una zona de árboles frutales bien cuidados

Lidio con la adversidad entre las malas hierbas, mientras al otro lado de la valla el dueño, mantiene limpio, cuidado, nutrido y regado.

Ahora es un gran árbol frondoso que ofrece una sombra en el polvoriento camino.

Llama la atención su tronco, reflejo de las vicisitudes sufridas que revelan cada hueco y cada nudo.

Mirándolo desde esta nueva perspectiva, se me antoja viejo y experimentado y su sombra, un lúgubre recuerdo de cuando apenas era una brizna que intentaba llegar lo mas alto, acercarse a ese Sol que no es igual para todos.

 Como siempre pasa. Depende del lado de la verja donde brotes.

jueves, 22 de mayo de 2014

Entre el susurro y el silencio



Soy consciente que un blog, requiere de cierto ritmo, para despertar un mínimo interés, pero escribir sin un sentido concreto es como las pintadas que asolan paredes y parque mobiliario de cualquier lugar.

Siempre he pensado que soy como todo el mundo, pero por suerte o desgracia, no lo soy.

He intentado varias vías para expresar mi descontento.
He asistido a los plenos del ayuntamiento, intentado comunicar mis inquietudes a la regidora de mi distrito, ser un asiduo del Chat del Alcalde de mi ciudad. He puesto quejas sobre injusticias tanto por vía judicial como por el Sindic de Greuges (al de Catalunya y al local). Incluso gritando en el desierto de internet, desde aquí, donde mis peticiones tiene la misma respuesta.

Siento una gran pena por mis conciudadanos. Cuando miro al suelo y veo la suciedad de los que tiran desperdicios al suelo, escupen o no recogen los excrementos de sus mascotas. Sobre todo cuando todo el mundo se queja de eso. ¿Quien lo ensucia si no?

La situación política actual no proviene de otro lugar que la ineptitud de la sociedad, que somos todos, sobre todo de esa mayoría que votó al PP, al menos los que no tenia un "beneficio" con ello. Todos se quejan y ahora nadie admite el error de haberles puesto al frente con mayoría absoluta.

Yo quisiera que el gobierno esté al servicio del pueblo, que los cargos sean contratos laborables como cualquier otro, sin derechos diferentes, sin prerrogativas, con las mismas consecuencias que cualquier ciudadano, con derecho a ser despedido si no cumple su cometido en un tiempo prudencial (desde luego no 4 años) con despido directo en caso de negligencia grave, como cualquiera.

Yo quisiera una transparencia diáfana y un regulador solvente para los datos que no puedan ser de dominio público.

Yo quisiera que se hiciese justicia, con jueces ajenos a la política, que salvaguarden las leyes que dicte el pueblo, no las que se le impongan.

Yo quisiera una cultura igual para todos. veraz, actual sin edulcorantes ni ponzoñas. La verdad nos hace libres, las mentiras solo vetan.

Yo quisiera una participación activa, en la que cuente cada voto personal en cualquier decisión política, que evite que un supuesto representante, nos engañe a todos.

Yo quisiera una vida, un lugar donde vivir, y un trabajo, donde la vida sea lo principal, el lugar donde vivir inviolable ante intereses deshonestos y el trabajo sea realmente un contrato bilateral donde se ofrece un intercambio justo entre ambas partes, sin desigualdades excesivas ni sometimiento.

Yo quisiera un sindicato dirigido por personas o entidades imparciales, que no dañen al empleado, adjudicándose el dominio de los representantes sindicales, ni que los empleados dañen a la empresa de modo que peligren la continuidad de los mismos puestos de trabajo.

Yo quisiera que como seres vivos, respetemos a los demás, sin imponer la fuerza ni envenenar nuestro entorno en beneficio de unos pocos. De creernos la cúspide de la evolución, cuando tenemos menos nobleza que un perro, menos amor al prójimo que un delfín, e insistimos en matarnos unos a otros no por supervivencia, sino por maldad, oportunismo y un innumerable sinsentido de causas, como matar por un o varios Dios/es.

Estoy seguro que casi cualquiera estaría de acuerdo con, si no todas, la mayoría de mis deseos, pero seguimos aquí, en esta nueva y enmascarada vida feudal a merced de unos cuantos.
¿Porque si la mayoría piensa así, no hace lo que dice?
¿Porque me siento extraño ante mis semejantes?

Dicen que la vida es demasiado -bonita-importante... para perderla. Me gustaría una vida que me pareciese bonita y que temiera perder.
¿Cree realmente que es una vida la del pájaro enjaulado?
¿La del pez en el acuario?. ¿Porque no prueba a vivir en la cárcel toda su vida? allí también estaría cuidado, alimentado y protegido de los "peligros" del exterior.

Para decir que somos inteligentes, no parece que actuemos como tales.

En unos días, tenemos la oportunidad de pasar por las urnas y comprobar que esfuerzo ponemos en conseguir nuestros deseos.

Admirado, Alejandro Magno, quiso conocer a Diógenes de Sinope, y le ofreció lo que quisiera. Le pidió que se apartase, pues le tapaba el Sol.

¿Que podrías obtener de un conquistador, todo obtenido por la violencia, de lo que pudieras estar orgulloso?
Le preocupaba mas lo que podía perder, como la luz del Sol.

Un poco más cuesta comprender cuando estando en el Ágora, fue reprendido por masturbarse, obteniendo por respuesta:
"¡Ojalá, frotándome el vientre, el hambre se extinguiera de una manera tan dócil!"


Cuerdo entre locos o al revés, su acción de protesta sigue vigente 2300 años después.


Aunque sea el desierto, si no gritas, no te oirá nadie.